En un contexto de amplio debate sobre el futuro de la UAM, el día de hoy, martes 20 de junio, iniciaron las solicitudes de citas para que la comunidad transmita a la Junta Directiva su opinión sobre la elección de rector general, sus reflexiones y preocupaciones sobre la Universidad.
Ya habíamos advertido, en el comunicado anterior, acerca de la práctica de ciertos grupos, especialmente de la Unidad Xochimilco, que aprovechando su actual posición de poder al interior de la institución, copan los espacios de citas para acceder a las entrevistas con la Junta, a favor de algunos de quienes hoy se presentan como candidatos a ocupar el cargo.
En el primer día de registro de citas hemos visto con preocupación que la vía presencial en el piso 5 de la Rectoría General recibió una atención prioritaria respecto a la vía telefónica, ya que inmediatamente la línea quedó saturada al estar atendida por una sola trabajadora. No se previó contar con apoyo adicional para recibir llamadas en otras líneas con la colaboración de al menos otra persona.
En cambio, la vía de solicitud presencial aseguró para los jefes administrativos y personal de confianza de la Unidad Xochimilco, una amplísima cantidad de citas con la JD, reeditando de esta forma el recurso ampliamente usado en el pasado por esos mismos grupos. Es claro que los responsables de funciones administrativas se vieron obligados a suspender sus actividades laborales durante varias horas para acudir personalmente a obtener su cita. A las dos de la tarde, los miembros de la Unidad Xochimilco se encontraron con que las citas ya se habían agotado para esta Unidad y para las Oficinas de Rectoría General, debiendo inscribirse en inciertas “listas de espera”.
Los miembros de otras unidades, que se habían desplazado para obtener su cita, debieron hacer cola por horas, hasta que el personal administrativo y de confianza de la Unidad Xochimilco concluyó su trámite.
Esta modalidad de registrar y conformar la agenda de entrevistas pone en duda la calidad de la auscultación, pues queda en evidencia la operación a favor de quienes se encuentran compitiendo desde una posición de autoridad organizando apoyos incondicionales desprovistos de argumento, dejando en desventaja a quienes desean participar con su opinión libre e independientemente y a los candidatos que no recurren a posiciones de privilegio para movilizar auscultados en su favor.
Pensamos que esta reedición de métodos de apoyos masivos incondicionales no conviene a la UAM en un tiempo que debería ser destinado a una reflexión seria y profunda sobre el actual estado de las cosas y sobre el futuro de la Universidad.
Reiteramos la preocupación sentida por la comunidad y manifiesta en el comunicado anterior respecto al brevísimo tiempo dedicado para las auscultaciones en las Unidades. Hoy vemos además que muy pocas Unidades han podido organizar presentaciones de los aspirantes ante los órganos colegiados, como correspondería a un proceso guiado por el más alto interés en favor de la Universidad.
Invitamos respetuosamente a los integrantes de la Junta Directiva a optar de inmediato por procedimientos que garanticen, no solamente una amplia participación de la comunidad universitaria en tan relevante proceso, sino una participación informada, seria y argumentada, disponiendo del tiempo que se requiera para conseguirlo. No es momento de caer en apresuramientos.
El futuro de la Universidad Autónoma Metropolitana está en juego.
Observatorio Universitario
Ciudad de México
20 de junio de 2017